Esta historia tiene tintes de película de Hollywood con toques muy castizos y aflamencados. Es una historia de artistas, musas y fantasmas buenos. Todo ello mezclados con el polémico programa de La 1 ‘La Familia de la Tele’. El cual se ha retrasado varias veces en su inicio, por circunstancias históricas y extraordinarias, por un lado. Mientras que por otro ha sido bastante polémico, con protestas de bastantes profesionales de la televisión pública que ven el programa como «un derroche del dinero de todos en unos contenidos de escaso bagaje y con un unos personajes de dudosa categoría moral», según estos propios profesionales.
Con esta introducción vamos a hablar de Lola Flores, una de las mayores artistas de la historia contemporánea de nuestro país, que además ha sido uno de las vecinas más ilustres de La Moraleja hasta su fallecimiento allá por el año 1995. La histórica tonadillera y bailaora tuvo su residencia, auténtico refugio de artistas y del ‘Clan Flores’ en la privilegiada urbanización del norte de Madrid. Una casa que tiene también un recordado nombre para los seguidores de la prensa rosa: ‘El Lerele’, una casa que según alguno de sus moradores y visitantes dicen que está encantada.

ISA PANTOJA Y SUS VISIONES SOBRENATURALES
Pero vamos a explicar lo que ha vivido la última y asombrosa sensitiva de ‘El Lerele’. Esa no es otra que Isa Pantoja, que ha sido uno de los grandes fichajes de La 1 para ‘La Familia de la Tele‘. La hija de la tonadillera, Isabel Pantoja, abandonaba Mediaset después de más de diez años como colaboradora y participante en sus programas y decidía apostar por el equipo de María Patiño en esta nueva aventura en el ente público. Junto a ellos, quiso sincerarse y contar uno de los episodios más traumáticos de su infancia.
Este curiosa historia comenzó el pasado lunes, cuando Pepi Valladares, antigua empleada de la famosa finca Cantora, admitía al programa que la hija de Isabel Pantoja «soñaba en quechua” tras ser adoptada en Perú con solo tres años. Según la trabajadora del cortijo, la cantante se escandalizó con lo que decía su hija por las noches y decidió contratar a varios expertos para comprobarlo y ver que pasaba con la niña.
“Yo esto no lo había escuchado. Cuando pensaba que nada podía sorprenderme…”, comentó la excolaboradora de Vamos a ver, quien admitía también que no sabía quechua. Por otro lado, en tono de humor Kiko Matamoros, famoso protagonista del programa, indicó que si al bebé que está esperando “le pones un fonendo habla árabe ya”, ya que el padre es su marido Asraf, de orígenes marroquíes.
“Yo pienso que no es verdad, ¿vale?”, volvió a incidir la hermana de Kiko Rivera. Aunque negó totalmente esta afirmación de Valladares, también confesó que no le sorprendería, porque en más de una ocasión ha asegurado que en Cantora ocurrían sucesos paranormales, como si de un portal hacia otro mundo se tratase: “Ahora, si doy por hecho que es verdad, me suena un poco todo a fantasía, porque claro, a ver, quiero decir, allí se viven cosas muy paranormales”. Unas afirmaciones que han impactado mucho a los seguidores del programa.
Pero la historia, lejos de rebajarse, siguió tomando cauces cada vez más surrealistas. Uno de los puntos álgidos del programa fue cuando se afirmó que las personas que allí residían llegaron a asegurar que la propia Lady Di “se fue para allá, para Cantora”, tras fallecer en París. “En vez de coger una explicación lógica, pues a lo mejor estaban dando noticias de ella y de repente yo soñé que se me despedía, en vez de darle esa explicación, pues a lo mejor ella lo cogió por esa fantasía”, revelaba Isa.
De hecho, el propio Matamoros recordó que “son varias las apariciones de Paquirri en Cantora”. “Hay una fantasía maravillosa, y es que el color de los ojos de Kiko Rivera eran azul como el mar, y al año de cumplirse el fallecimiento de Paquirri se volvieron negros, esa misma noche. Los niños cambian de color de ojo con la lactancia, no de uno para otro. Y hay apariciones extraterrestres”, enumeró el famoso tertuliano.
Sin embargo, Isa Pantoja le dio la razón: “Sí, es verdad que dice que hay ovnis, pero por ejemplo, yo no creo en esas cosas”. No obstante, admitió un hecho que dejó a todos sus compañeros patidifusos: «Yo vi a Lola Flores cuando Lolita estaba en La Moraleja”. Se trata de un suceso ocurrido supuestamente en la casa ‘El Lerele’ y mucho después del fallecimiento de la cantante. “No lo sé, eso me lo contaron”, explicó la creadora de contenido en redes, sin aportar mucha veracidad a su propia anécdota.