Culmia ha iniciado la fase previa al proceso de comercialización de las dos promociones de La Solana de Valdebebas, también conocida como la Solana de la Moraleja. La promotora anunció el pasado mes de marzo la construcción de 83 viviendas con una inversión cercana a los 93 millones de euros.
Los comerciales de la promotora han comenzado a descolgar el teléfono para preguntar a los interesados en las dos promociones si realmente buscan una vivienda de entre 1,5 y tres millones de euros, dado que muchos de los apuntados hasta ahora buscan una de las viviendas asequibles promocionadas por el Ayuntamiento de Madrid. Estas dos promociones forman parte de la nueva estrategia de Culmia en el sector del lujo, dada la escasez de viviendas en los principales ejes de las ciudades.
Los dos proyectos de la promotora inmobiliaria, denominados Culmia Virere Aqua y Culmia Virere Quetzal, se extienden a lo largo de una superficie de 120.000 m² y contarán con un total de 83 inmuebles, todos ellos centrados en el nuevo ecourbanismo y destinados al lujo. Ambas comercializaciones suponen el 6,6% de las 1.393 viviendas que se construirán en la zona.
Las dos promociones de Culmia serán de las primeras en ser levantadas. Las obras comienzan en medio año, mientras que la comercialización ha comenzado a andar. «Normalmente, para este tipo de promociones y dada la alta de demanda se está comenzando con seis meses de antelación antes de construir», señala una de las fuentes de Culmia consultadas por este medio. En este sentido, los interesados no tienen un plano o un boceto, «van a ciegas». Y es que, las viviendas tienen dos, tres, cuatro o cinco habitaciones, donde la distribución cambia por completo. «Ninguno de ellos ha visto aún los planos», destacan.
LOS COMERCIALES DESCUELGAN EL TELÉFONO PARA REALIZAR LA PRIMERA CRIBA
En esta primera criba, en Culmia se cercioran si los interesados están «muy interesados» o bien solo buscan información para valorar la posibilidad de entrar en una vivienda de lujo. De hecho, quienes quieren entrar «suelen colocarse en las primeras posiciones. Se les da preferencia frente a un posible inversor que busca obtener una posterior rentabilidad con la compraventa del inmueble». el tiempo es crucial para esos inversores y estas dos promociones no invitan a la especulación, dado que comenzarán a construirse en 2026 y se entregarán en 2028. Para entonces, el mercado inmobiliario puede sufrir una transformación por la normativa si finalmente hay un cambio de signo político con las elecciones generales de 2027.
No será hasta bien entrado el mes de junio y julio cuando los interesados reciban los planos de los distintos tipos de viviendas que se pondrán a la venta sobre plano. «Esta primera criba ayuda a diferenciar compradores de curiosos», indican las fuentes. Después, hay una segunda e incluso una tercera, dependiendo de la financiación de los inmuebles.
El equipo de comerciales tiene muy claro a quién llamarán por segunda vez, cuando se entregarán los detalles a los potenciales compradores, siempre sobre plano, sin conocer la ubicación exacta de cada uno de los inmuebles, sino de los que busca exactamente dependiendo de la distribución y el número de habitaciones. El margen para la promotora está en línea con el mercado, según puntualizan fuentes del sector.
Las promociones son fruto de una joint venture entre Culmia y Alterna Consulting. El estudio de arquitectura Morph se ha encargado del diseño. Tan solo 10 viviendas llegan a los cinco dormitorios y piscina, mientras estarán rodeados de un jardín de 500 metros. Asimismo, el interior está en manos de Vilablanch.
DOS PROMOCIONES Y CON QUEJAS VECINALES EN LA MORALEJA
Las promociones Culmia Virere Aqua y Culmia Virere Quetzal se asientan junto a El Soto de la Moraleja y El Encinar de los Reyes, dos de las urbanizaciones más exclusivas de Madrid y ubicadas junto a la R-2, Valdebebas y el aeropuerto. Los centros comerciales más cercanos son El Bulevar y Moraleja Green, cuyos vecinos se oponen a las modificaciones diseñadas hasta ahora debido a los ruidos e incidencia en el tráfico de la zona.
la remodelación busca descongestionar la zona, pero será una vía directa para las más de 1.300 viviendas de La Solana de Valdebebas o como se la conoce ya La Solana de la Moraleja, es decir, una mejora para albergar aún más tráfico. La medida no contenta a los vecinos, que verán casi la entrada de la autovía frente a sus viviendas.
Las soluciones para evitar los obstáculos a la movilidad pasan por una remodelación, un plan que el Ayuntamiento de Alcobendas quiere poner en marcha tras haber consensuado con todos los afectados, incluyendo a la Entidad de Conservación, que ha dejado claro en su última junta que se defiende el mantenimiento íntegro de la plaza.
